¿Ser un excelente trabajador te va a convertir en un buen jefe? Sigue leyendo, el resumen de hoy te va a interesar 👇

Punto de partida: eres un profesional brillante, comprometido, con buenos resultados; pasan los años y llega un día en el que, o bien porque quieren aumentar tu salario y no hay otra forma de hacerlo, o porque ya «te toca», te hacen jefe. Sin periodo de adaptación y muchas veces sin formación específica.

Al no existir ni lo uno ni lo otro comienzas a aplicar en el nuevo rol lo que te hacía sobresaliente en el antiguo y … ¡sorpresa! no funciona, tus resultados dejan de ser excelentes y comienzas a sobrevivir… ¿Te suena? Seguro que sí.

En el artículo del Observatorio de RRHH que comparto hoy, se plantea:

1️⃣ «Los líderes deben dominar la definición de expectativas, la delegación, el seguimiento sin control excesivo, la contratación, el feedback, las conversaciones difíciles, la responsabilidad, la resolución de conflictos y mucho más».

En tu puesto de profesional de base posiblemente no necesitabas nada de esto, pero ahora… mientras no tengas desarrolladas estas competencias, será difícil que seas un buen jefe (lo de ser buen líder con esas carencias es ciencia ficción)

2️⃣ «Cuando a la falta de capacitación de los líderes se le suman las disrupciones y constantes desafíos de la nueva era, nos damos de bruces con empresas fraccionadas cuyos liderazgos no permiten sacar el potencial de las personas de sus equipos, especialmente el de las generaciones más jóvenes».

La gestión de la incertidumbre, la adaptabilidad, habilidades muy vinculadas con las nuevas tecnologías, son imprescindible, aunque haya jefes (dejemos de hablar de líderes) que lo del upskilling y reskilling ni está ni se le espera.

3️⃣ Unido a lo anterior «sin líderes que evolucionen, las empresas se estancan. En un entorno que exige aprendizaje constante e innovación, un líder estático obstaculiza el crecimiento de su equipo y termina perdiendo la estima de estos y su propia confianza».

Pero estos jefes ¿son 100% «culpables» de la falta de capacitación para liderar a sus equipos? Seguramente no; muchos de ellos creyeron que con lo que sabían y les había funcionado en el pasado podrían hacer frente al reto; no estaban preparados para cambiar de rol e incluso, puede que nadie se lo pidiera.

¿Cómo podemos ayudar desde las áreas de desarrollo de RRHH a los casos «reconducibles», a los que quieren hacer bien su papel? Acompañándolos a explorar:

✔️ ¿Qué miedos tienen?
✔️ ¿Qué es lo que les frena?
✔️ Identificar si no avanzan porque no saben, no quieren o no pueden.
✔️ ¿Su responsable los incita a seguir mejorando o simplemente «pasa»?
✔️ ¿Son conscientes de cómo afectan a sus equipo? ¿a la empresa? ¿a los resultados?.

Por experiencia sé que, si el jefe está comprometido con su propio desarrollo y está dispuesto a hacer introspección, el acompañamiento individualizado da sus frutos. ¿Qué opinas?

 

Fuente de imagen  wayhomestudio en Freepik
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